miércoles, 17 de octubre de 2012

Pizarra: lo que dejó la plata.



Pizarra: lo que dejó la plata


La plata del pobre
aún luce en Hiendelaencina
bajo el rojo atardecer.
La chimenea del horno,
con su escalera de ladrillos,
se alza en medio de la nada
o antes de la campiña.
Ecos del pasado deambulan
por las avenidas
en las que ahora habita el silencio
de la despoblación.

Se marchó la plata
a la casa del rico.

Ni La Suerte,
ni La Fuerza,
ni las mismísima Santa Catalina
salvaron al pueblo del olvido brillante de la plata.

En sus tejados queda la plata negra,
la que luce con la lluvia de septiembre,
la que estuvo antes de la venida del hombre
hipnotizado por el magnetismo del metal,
la que llena de sombras los huecos que dejó la luz.

El hombre. Dejó su corazón
en los negros pozos,
donde ahora duerme
sepultado en galerías eternas,
paraíso de gusanos y deseos.

2 comentarios:

  1. Me gustaría contactar contigo para hacerte una “proposición honesta” referente a tu relato y poema de Hiendelaencina. Te dejo el motivo en este link.
    Saludos.

    http://www.authorstream.com/Presentation/toninet-1988294-hiendelaencina-sierra-norte-guadalajara/

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  2. Buenas tardes, tan tardes como dos años tarde. He tenido bloqueado todo éste tiempo los mensajes de entrada por lo que acabo de leerte. Menuda sorpresa y menudo trabajazo el tuyo. Lástima haber llegado tan tarde, pero bueno, para cualquier cosa puedes contar conmigo. Un saludo

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