domingo, 16 de diciembre de 2012

Bornova, espejo del cielo.





Bornova, espejo del cielo

Custodian el río Bornova
montañas negro y ocre,
espejo del cielo gris de invierno,
recortadas por la mano torpe,
ingenua,
del paso del tiempo.
Enmohecidas moradas para enanos
se mantienen en pie
sólo con el calor del ganado
y las estatuas de robles desnudos.
Imaginarias casas para brujas
si hubiese alguien a quien embrujar.
No hay cantares,
ni canciones,
ni caminos,
donde la vida no asoma
ni para mirar en un descuido.
Queda el río,
con su eco peregrino,
ajeno al viandante
que mengua a cada paso
y se encuentra, perdido.

A nadie espera el paisaje lunar.
Muere el brillo de la pizarra
sin ojos que lo puedan mirar.



sábado, 1 de diciembre de 2012

SIESTAPERRUNA (sinacentos)


SIESTAPERRUNA  (sinacentos)

Hasta los perros sueñan con la siesta,
con el descanso ininterrumpido
de una tarde de luces empolvadas  tras los visillos,
mientras la estufa de leña
refunfuña como un viejo cascarrabias..
Los ecos del ardoroso telediario,
ecolalico y tedioso,
generan el mantra narcotico,
antesala de la caida al vacio.

Ya solo queda el ronquido
de la sirena
del
m
a
r.

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Primero de Invierno


Primero de Invierno 

                                                    (Luna de Atienza 28 de noviembre 2012)


Corren y vuelan pasajeras
las nubes que no ocultan la luna llena.

El humo de las chimeneas
invade las calles de Atienza,
reposa en los huecos de cada rudo sillar,
e impregna los arcos de piedra.
Perros malhumorados nos ladran al pasar
para luego volverse recitando su letanía
de manera casi enfermiza.
Ha llegado ya el invierno.
Las primeras nieves han esperado
hasta los últimos días de noviembre;
atrás quedan los cumpleaños del escorpión,
las tardes crudas de velorio
y las nuevas venidas al mundo.
Memoria, muerte y vida
se maceran en la marmita
bajo la maza del druída.
Renace el viento;
y relincha con sus pulmones de hielo,
despierta despierto del sueño soñado
bajo las sábanas ocres del otoño.

Bríndame una mañana de frío
a los pies de la fortaleza escondida,
con mi cigarro encendido
y tu aliento en mi cabeza.




lunes, 19 de noviembre de 2012

El nombre. Una ene con un lazo

El nombre. Una ene con un lazo.



El hombre hace su nombre
en el camino despacio,
en la senda verde
aderezada de cardos
y flores tricolores..
Entre gritos alveolares
y chasquidos palatales
surge la voz;
de la voz el nombre, de la voz el hombre.
El latido intrauterino,
el acolchado ruido de cada instante,
el calor y el mar del vientre de la madre
cincelan el nombre de cada hombre que nace.
Símbolos, runas,
toponimias de lagos y valles,
profetas bíblicos, ecos mapuches,
hebreos aizkolaris, mártires del santoral,
dioses minoicos, árboles genealógicos,
ritos paganos al astro rey, testamentos y herencias familiares.
Todo dispuesto en el atanor de los alquimistas
para que surja "la palabra",
el nombre,
el hombre.
Una ene con un lazo.

martes, 23 de octubre de 2012

"Poca seta de cardo" (Fandango micológico de Alpedroches)

                               (Degustando seta de cardo de Alpedroches, con permiso del alcalde, Jose)

"Poca seta de cardo" (Fandango micológico de Alpedroches)

Porque soy un caballero,
porque soy un caballero
y si no lo digo ardo,
hay mucho cardo setero
y poca seta de cardo,
se lo digo al mundo entero.


No caben en un capazo
los níscalos que tu coges,
no caben en un capazo,
pero yo tan sólo veo
mil coches en los ribazos,
no hay tanta seta en el monte.

sábado, 20 de octubre de 2012

Día de lluvia en el mercado.

Día de lluvía en el mercado.
















                       (Frutería de Sigüenza.Año 2011)

De la noche
la luna y las estrellas.
Del otoño
las setas.
De la esperanza
el fracaso.
Del miedo
la risa y una escalera.
De la tela
la seda.
Del corazón
las grietas.
Del sueño
el despertar entre velas.
Del tiempo
el espacio.
De su compañía
la ausencia.
Del postre
la almendra.
De su sonrisa
las cejas.
Del amor
un nudo a un manojo de venas.
De su boca el silencio
y de sus pies las durezas.
Y si no tiene nada de esto,
no se preocupe señora
es posible
que mañana vuelva.

miércoles, 17 de octubre de 2012

Pizarra: lo que dejó la plata.



Pizarra: lo que dejó la plata


La plata del pobre
aún luce en Hiendelaencina
bajo el rojo atardecer.
La chimenea del horno,
con su escalera de ladrillos,
se alza en medio de la nada
o antes de la campiña.
Ecos del pasado deambulan
por las avenidas
en las que ahora habita el silencio
de la despoblación.

Se marchó la plata
a la casa del rico.

Ni La Suerte,
ni La Fuerza,
ni las mismísima Santa Catalina
salvaron al pueblo del olvido brillante de la plata.

En sus tejados queda la plata negra,
la que luce con la lluvia de septiembre,
la que estuvo antes de la venida del hombre
hipnotizado por el magnetismo del metal,
la que llena de sombras los huecos que dejó la luz.

El hombre. Dejó su corazón
en los negros pozos,
donde ahora duerme
sepultado en galerías eternas,
paraíso de gusanos y deseos.

sábado, 29 de septiembre de 2012

DIXIT I

DIXIT I  "Juegos, tableros y juguetes"



Carta primera

Sobre el suelo ajedrezado
una partida de ajedrez,
mariposas de corazones
bailan atolondradas
alrededor de los enamorados,
mientras él, con una sonrisa falsa,
amenazaba a la reina blanca
con su rey negro
seguro de su jaque mortal.

Carta segunda

Kirikú y Misha se han enfadado.
El llanto de Misha es de dolor
La tristeza de Kirikú
de incomprensión,
pero no suelta el tirachinas de su mano.

jueves, 30 de agosto de 2012

MÁQUINAS

                                                                    (Máquina de escribir música)

MÁQUINAS

Máquina de escribir música acuática,
notas asmáticas
y melodías pragmáticas.

Máquina de rimar versos,
unos malvados
otros perversos.

Máquina de inventar cuentos,
unos soñando,
otros despierto.

Máquina de atar cordones,
para zapatillas
y zapatos sin tacones.

Máquinas de escribir,
una al levantarse,
otra después de comer
y otra antes de dormir.

Máquina de hacer agujeros,
taladra la tierra
y sale por el otro extremo.

Máquina de hacer besos,
cóncavos y convexos.

Máquina de afeitar,
de la nuez al paladar.
 .
Máquina que detiene el tiempo,
manecillas de plomo,
rodines sin dientes
cubiertos de acero.

Máquina de susurrar
primeras palabras
al despertar.

Máquina exprimidora,
de hígados, pancreas
y nectar de mora.

Máquina de calor,
con efecto deshidratador.

Máquina de partir almendros,
prismas, cubos
y otros poliedros.

Máquina de no esperar,
ni en los semáforos
ni en países de ultramar..

Máquina de hacer lágrimas dúlces,
labios de piedra
y noches sin luces.

Máquina de vacear ceniceros,
sobre señores de smoking
y sus negros sombreros.

Máquina de hacer desiertos,
mares secos
y ríos muertos.

Máquinas de alquitranar,
(prados y bosques)
de estas no quermos más.

... máquinas
... malditos inventos
... los tiempos son lentos.

miércoles, 15 de agosto de 2012

Cabárceno: parking de los tigres

Y entonces lo vi claro.

Entre inexistentes gritos de animales dormidos,
idas y venidas de vehículos
buscando aparcamiento felino,
largos minutos de espera,
selva inventada en un paraiso minero
y caminos de asfalto que partían de la senda de los elefantes,
apareció el indio sin tomahawk.

El indio,
salido de las calles de Santander,
surgió de las sombras de la tarde
montado en su Apaloosa rojo
y se nos acercó cargado de cuerdas y alambres
para darnos la libertad de retornar al sur.

El sudor que empapaba el forecejeo
bajo la puesta de sol
era absorbido por las grietas de sus manos de polvo y arena.
Firmes, aferadas a sus artilugios de metal.

Hasta que con precisión de relojero
extrajo la tarjeta de la ranura
situada bajo el botón del aire acondicionado
y como un pretidigitador
la sacó por el hueco que antes había abierto en la puerta
con un bombín de presión sanguínea.

"Sería la primera vez que se me resistiese uno"
nos dijo con las llaves del coche en la mano.

lunes, 30 de julio de 2012

Días de playa y arena.

Arrastro las piernas bajo el calor de la bruma
que envuelve la ciudad en la distania.
El ejército de luces visto desde lejos
parece más fascinante y menos temible,
como si nunca nos pudiese alcanzar.
Sin embargo desde aquí somos parte
de otro ejército de luces.

Desde las terrazas y las azoteas
acechan francotiradores de la palabra
que cambiaron sus trincheras de visillo
por estas de cemento, cristalera y ladrillo.

El mar abierto mece la arena.

El ecosistema a preservar es de hierbas secas,
descanso para la vista entre torres de hormigón,
parque infantil en medio de la urbe
dónde los árboles no susurran silencios
y hasta donde las grandes aves no llegan.

Desierto de sal, espejo de arena.

Ciclistas sin mapamundi,
patinadoras sin cena,
calles sin voces amenas,
sin santos, sin penas,
helado de vainilla y galleta,
según dices la horchata está buena.

A mi tampoco me hace especial ilusión
un viaje a un lugar sin verbenas,
pero se detiene el tiempo cuando estás a mi lado
y eres lo único que merece la pena.

Playa y arena.

martes, 24 de julio de 2012

Caramelos de Malvavisco

Caramelos de Malvavisco

La demencia trae el recuerdo
de caramelos de malvavisco
hechos con azúcar tostado.
De un perro que no quiere ladrar
por la ausencia de niños que lo molesten,
pero que sigue ahí, inmovil, perenne.
Anunciando las últimas horas.

¡Llevadme a mi casa!,
ya sé que estoy en ella,
pues no os cansáis de repetirlo,
pero me siento desprotegida,
en la calle,
a merced de lo extraño y ajeno.

La demencia me crece
entre letanías de viudas beatas
que me han encerrado tras las puertas
de color verde persiana tachonadas en negro.

¡Abridme las puertas!
Quiero descansar en mi patio con pozo
y mirar como pasa el tiempo tras la ventana,
donde la demencia no crece
ni necesito que me envenenen con yogurt azucarado,
galletas con leche y gajos de naraja.

Dejadme en mi casa,
con mi tresillo de tela
mi foto de boda,
mi bastón de madera
y mi reloj que hace años no suena.


domingo, 8 de julio de 2012

Soñado vals de invierno sobre la laguna de Hortezuela


Soñado vals de invierno sobre la laguna de Hortezuela   
             
                       I
Seguiré tus pasos por la laguna helada
distraído por el ágil vuelo de una cometa,
y nunca sabré si el hilo tira de mí
o si mi brazo lo maneja.
Es la arteria que nos une.
                       II
Beberemos del agua
que busca su descanso en el lavadero,
junto a las huertas sembradas en cajas de cerillas
y sus espantapájaros con latas,
cintas de plástico azul
y otros artículos de anticuario.
                      III
Desde lo alto nos estará viendo
el arco derruido que otea
en la fortaleza de Océn,
hoy destino santoral de ovejas devotas,
antaño polis de culto desconocido.
                      IV
Guarda tus guantes térmicos
y baila conmigo un vals de invierno,
no temas que caigamos
cuando abrazados nos encontramos
entre la tierra y el cielo.

sábado, 30 de junio de 2012

SI A MI ME GUSTA QUE SUENEN

                                   (Escuela de Anguita, que el próximo año permanecerá cerrada)

SI A MI ME GUSTA QUE SUENEN

Al caer la tarde zumbido de moscas
y ladridos de perros atados en un corral.
En la casa, trajín de maletas
sin cerrar.
Pálpito de balón de reglamento sobre el alquitrán
y sudor de niños con las caras coloradas por el sol;
el pueblo se siente invadido de gritos
como un campamento de verano
que quedó abandonado en el frío invierno.
El río, mermado por la sequía,
corre suave
bajo el Molino de Jesús
y sus inventos para una olvidada
exposición universal del siglo diecinueve.
Ya no se oye el chirriar
de los columpios del colegio,
sus puertas permanecerán cerradas
hasta nueva orden
que tardará años en llegar,
si es que algún día llega.
"Si a mi me gusta que suenen
pa que los quiero engrasaos"


                                                                  (Que no se cierren más colegios de la escuela rural.
                                                                                    A mí me gusta que suenen)

sábado, 23 de junio de 2012

Kaspar Hauser (¿dónde estás Werner Herzog?)





Kaspar Hauser (¿dónde estás Werner Herzog?)

¡Vuela Kaspar Hauser!
Ve corriendo a tu desierto y hunde tus extrañas botas en sus dunas,
escucha al ciego bereber y sigue el norte que marca el sabor de la arena.
Ríete de los artilugios de metal y de las brújulas modernas.
Abre las puertas de la ciudad escondida para ver qué tesoro esconde,
con tu mirada inmóvil de recién llegado al mundo.
Allí te espera el monarca enano de Punt;
el niño al que Mozart abdujo
y el sonido de la flauta del inca despojado,
que trepó al árbol para huir de sus manos enguantadas en blanco.
Al igual que tú, son los huérfanos de Europa.

Recorre los caminos del Caúcaso
al abrigo de tu manto tarkovskiano
y pregona a los cuatro vientos
que todo lo que hace latir tu corazón
está dentro de ti,
que nadie te lo ha dado.
Que sólo te dieron la palabra
para escuchar las suyas puestas en tu boca.

Silogismos disyuntivos que afirman lo negado
no alcanzan a saber de la existencia del sapo
que nos ayuda a conocer la verdad;
los mentirosos son batracios ante los demás
y  los honestos dicen no serlo por temor a la mentira.

Olvida la rancia Europa,
sus hombres de negra levita y sombrero de copa
ya tienen lo que ansiaban:
un cerebro entre sus manos
para distinguirte de ellos,
para decir que tú eres el loco
de pensamiento anómalo y salvaje.
Sin el acta del secretario jorobado
no podrían dormir por el peso de la duda inquieta.

La educación para el "pequeño salvaje" de L´Aveyron
es la que recibimos todos
como yugo a lomos de buey
tirando de sus carretas.
Es la que diseñaron para pasearte en el circo freak,
alimento de compasión aristócrata y burguesa.
Te enseñaron a soñar
para luego revelarte el misterio
de que los sueños estaban reñidos con la realidad.

Como tú mismo dijiste,
estabas mejor en tu caverna,
con tu caballo sin jinete
de madera.

Ahora ya eres libre,
de sus torres izadas por arquitectos gigantes
y de sus cadenas.
Ni en el momento de partida comprendieron
que tu historia sin final
era su enigmática condena.

martes, 5 de junio de 2012

TAJUÑA: El Río de Kurosawa.



                              (El Río Tajuña visto desde mi casa, Anguita, cualquier mañana de invierno)      


TAJUÑA: El Río de Kurosawa

Amanece dormida la quietud
y sólo el rumor del río
y el canto del pardillo
la acompañan
bajo la inmóvil burbuja celeste.

Me sobran las pocas luces
del alumbrado público
que todavía permanecen encendidas.

No necesito caminar
para saber lo que sucede
diez mil varas más al este
o al oeste
y sin embargo me gustaría estar allí
para escuchar al río
nacer cada día en El Recuévano;
pasar por Luzón, como un correcalles
de diablos negros cubiertos de hollín;
o junto al puente del Ceño del Ojo
y el secreto que guardan
sus tumbas olvidadas.
Desde más allá
la Torre de La Cigüeña,
guardián de piedra,
lo avista cada mañana
y nos lo anuncia con un alarido mudo.

Lo escucho saltar
bajo la oxidada compuerta
de la fábrica de Harinas La Prusiana,
y también sorteando el Castillo (que sólo fue torre)
de Albalate.

Mi oído sólo alcanza
hasta el cementerio de Cortes,
y allá lo pierdo,
como si lo acompañase en su entierro.
Sabiendo que nunca llegaré a entender
que el río sigue
aunque no pueda imaginar como son sus huellas
ni sus pasos.

lunes, 4 de junio de 2012

SCOLOPENDRA CINGULATA

                     (Escolopendra encontrada en el paraje de Las Ceñas - Anguita)

Scolopendra Cingulata

Como un tren de juguete
camina la escalopendra.
Avanza, hace una parada
aunque no necesita repostar
y se queda inmóvil, ciega,
intuyendo lo que pueda pasar.
Artrópodo esquivo,
pesadilla de mar.

Al tiempo se enrosca,
muestra al sol el brillo
de sus colores sulfídricos
invitando a no acercarse,
a estimar el riesgo
y sopesar la proximidad impaciente
del que se ve atraído por sus anillos articulados.

Como un ciempiés radioactivo
camina la escalopendra.
Sus uñas frontales
recuerdan falanges primigenias
de los antiguos dioses-monstruo
que poblaron la tierra.

Corre, refúgiate bajo las piedras
y huye. Como sigas ahí quieta
pensaré que te ríes de mi tamaño
diez mil veces mayor que el tuyo,
o que me retas sabiendo
que si me acerco a ti
tus progenitores gigantes
me harán temblar de miedo
cuando los sueñe
reptando bajo mi cama.

Escalopendra.

¿Por qué no me habré encontrado
con un triste ciempiés
inspirador de poemas infantiles?

lunes, 28 de mayo de 2012

Paseo de sombras.

Paseo de sombras
                                                             (Edificio salinero de Imón. Sombras)

Paseo de sombras,
de tablero de ajedrez,
juego sobre adoquines blancos y rosados.
Ciudad de la luz
y reino de la oscuridad.a un mismo tiempo.
Es el camino quien te elige,
te atrapa de pies y manos
y al azar te devuelve la libertad.

Paseo de sombras.
El cuervo levanta su vuelo
y abandona su improvisado aposento de metal,
triángulo que anuncia
la llegada de curvas peligrosas.
Sombra de cuervo. Negro sobre negro.
Curvas peligrosas, cuervo sobre blanco.

Paseo de sombras,
coloquio de chopos en primavera
distantes por culpa del desbroce forestal.
Estiran sus brazos deseando amarse, o por mera fraternidad,
en el intento pierden sus más frágiles hojas
mientras acomodan su cuerpo.

Paseo de sombras,
un cruz floral aparece y desaparece
de un fotograma, saturando el umbral de amarillos,
recordando la fugacidad del tiempo.

Paseo de sombras. Y luces.

                                                         (Lotte Reiniger "Papageno" 1935)

martes, 15 de mayo de 2012

De los saberes extraños (desatascando el desagüe del patio trasero)

                             (Machinarium)

De los saberes extraños.
Ocultos bajo una losa de plomo.

El olor del agua estancada
arrastra mi mano hasta el subsuelo
y el muelle deslizante
llega acompañado
de un pasado de inútil limpieza corporal
que me resulta distante. Ajeno.
¿Por qué limpio
los restos de otros?

Todo lo que pensamos
que llevamos dentro, ulcerante,
en algún momento ha de salir  fuera,
como las culpas que no nos dejan
vivir en paz.
Las huellas del crimen
no se borran con la lluvia
ni con una manguera a presión,
tampoco con detergentes abrasivos.
Esperan a las otras huellas
y se tornan suelas, pies y pasos.

No somos un agujero negro;
más bien un filtro relleno de cal
hidratado con aceite de linaza
cualquier atardecer de otoño.

(¡Chulhu!, ¿sigues ahí dentro?)



lunes, 7 de mayo de 2012

Estatuas de FIMO

ESTATUAS DE FIMO (Quién me mandaría a mí)

(Recién sacadas del horno, con lo que les ha costado a mis críos hacerlas)


Calciné las estatuas de FIMO.
Ahora me miran desde encima del televisor,
donde las ubiqué como figuras de arte tribal.
La cuarta, empezando por la izquierda,
minutos antes
fue un gracioso Bob Esponja.
Me echan en cara mi despreocupación por ellas,
mi olvido.
Quieren perpetrar en mi retina
su grito mudo tras los cristales del horno,
sus cuerpos derretidos como chocolate
en el desierto..
¿Homenaje a Munch?
Diez minutos a 200º,
así lo leí en algún lado,
o se lo escuché a alguien,
no sé.
Como tantas otras cosas,
tal vez lo inventé.
El caso es que ahí siguen.
Y no me importa su decadencia,
a mi me gustan.
Además,
tenía mis sentidos demasiado ocupados
en el llanto triste
como para pensar
si estarían pasando calor ahí dentro.

sábado, 5 de mayo de 2012

LA CRESTA DEL DINOSAURIO


LA CRESTA DEL DINOSAURIO

Flanqueo la cresta del dinosaurio fósil
que custodia Padilla del Ducado
y veo los pastos imberbes
de la primavera tardía.
Del invierno perenne.

En mi vientre se retuerce
la tostada matutina
y el café recalentado
del miércoles.
Problemas de acidez.

La carretera desierta
invita al olvido,
al presente sin mañana.
Otra forma de inmortalidad.

Pongo cada pieza de mi puzzle en su lugar,
meobservomediagnosticoypongocura,
o remedio pasajero.
Sucede en un instante.

Detengo mi coche en medio de la calle,
lo reviso, como antes me revisé a mí,
somos uno.
Apago la radio, abro la puerta.
Escucho sus voces y todo vuelve a su sitio,
me llaman.
Un día más,
todo tiene sentido.


                                                                                             Del invierno perenne
                                                                                             problemas de acidez.
                                                                                             Otra forma de inmortalidad
                                                                                             sucede en un instante.
                                                                                             Un día más,
                                                                                             todo tiene sentido.

miércoles, 2 de mayo de 2012

La soga


LA SOGA

Miraremos atrás
pensando en nuestras sombras,
en el sol del pasado
y en la risa contagiosa
incrustada en imágenes de Super 8.

Nos veremos como niños
correteando alrededor de una piscina hinchable,
empuñando pistolas de agua
bajo la copa de un ciruelo manco.

Intentarán convencernos de que no,
de que no fue cierto.

Lo repetirán mil veces
hasta seguir creyéndolo ellos mismos,
hasta convertirlo en un sueño de lo que no fue,
hasta que se llenen las enciclopedias de mentiras,
hasta empapelar las calles con sus dedos acusadores,
hasta hacerlo sinfonía para radio y televisión,
HASTA QUE SIENTAN COMO NOS APRIETA SU SOGA,
hasta vociferar un mantra colérico,
hasta que tengamos miedo de decirlo como elogio de locura,
hasta que nos lo ladren perros y gatos cuando se crucen al andar
y se ondee en banderas victoriosas al paso amargo de la paz,
de la sumisión adquirida.
Bajo yugos y flechas.

Y después de todo,
como locos, nos seguiremos riendo,
al saber que sólo se recuerda una risa
si se vuelve a sonreir.

Que os follen.

domingo, 22 de abril de 2012

CONSPIRACIÓN CONTRA UNA ARAÑA.


Que se quede la araña en su cueva,
que no trepe hasta mi almohada
y no vuele si no vuela.

Que se rompa su tela,
que no suba baldosas ni aceras
y naufrague en un barco de vela.

Que no anide entre mantas ni telas,
que no viva, ni muera.
Que descanse despierta.

Que no coma ni beba,
ni impregne sus patas de cera.
Que nadie caiga en su trampa, en su hoguera.

jueves, 19 de abril de 2012

DE RONDA

De Ronda

Para un grito sin fin,
una prima de violín.
Para tapar al violín,
unas notas del flautín.
Para tumbarte en la era,
una flauta travesera.
¿Un sonido verdadero?
sin duda el del pandero.

Si ves llegar un alud,
un pericón al laúd.

Para los dientes con sarro,
un redoble de guitarro.
Para un repique de maitines,
mejor prefiero chinchines.
Para las rondas de quintos,
se ha de escuchar el requinto.
¿Un sonido atronador?
octavilla con amplificador.

Si buscas un soniquete,
que suene el clarinete.
Si es dominante la tónica,
que sople la armónica.

Para que vibre tu corazón,
de la guitarra el bordón.
Pero la coz,
si quieres una buena coz...
La voz,
¡qué se oiga la voz!







miércoles, 11 de abril de 2012

EL HOMBRE PEZ

El Hombre Pez.


El Hombre Pez vive en penumbra,
alguien olvidó correr el visillo por la mañana
y lleva todo el día anhelando al sol lejano.
Entre burbujas rotatorias dirige sus pasos
hacia la piedra roseta
donde se escribe su destino
al fondo de la pecera ojival.
El espacio elíptico
le hace orbitar,
dormir  el sueño marino
observado tras un ojo de buey.
Da una lazada con sus aletas
a los cordones de sus botas impermeables.
Tensa los tirantes rojos.
Ajusta su corbata.
Abotona su camisa.
Se dispone a trepar.
Justo al llegar a la superficie
recuerda su respiración branquial
y vuelve a su piedra roseta.
A soñar con el mar.


martes, 27 de marzo de 2012

Si entre los dos suman diez es porque tienen diez cada uno.



Ya la había perdido entre el eco de mi voz
cuando quise rescatarla de su laberinto
cuyos muros yo mismo había levantado 
con mis manos.
Me lo anunciaron sus ojos
desprovistos de mirada
de tanto querer ver
a través de sus oídos.
Me lo advertía su ausencia
cuando yo me escuchaba
hablando en lengua arcana y semítica
ajena al lenguaje del agua.
Pintaré ojos en mis dedos
sobre una boca alegre
que regala sonrisas
al contar.
Regresa Ana María,
ya he aprendido
que si entre dos suman diez
es porque tienen diez cada uno.

("Pensaema" a Ana María Arias, tras darme cuenta de que quien se equivocaba era yo, al decirle que si entre dos tienen diez cerezas no podían tener diez cada uno)

viernes, 23 de marzo de 2012

POEMA EDGARIANO



POEMA EDGARIANO
¡Rafa tú!
¿Rafa yo?
Rafatú.
¡Rafael!
Rafa él ... no.
Profe, Rafa tú.
La Calabaza Pepa
no puede andar.
(poemamiento o pensaéma de Edgar Caballero
6 años, Asturias)

lunes, 12 de marzo de 2012

El Inocente



El inocente juega con la muerte
por no sentirse amado,
ni útil, ni necesario.
Contiene sus lágrimas
en el camino maltrecho 
del silencio esquivo,
antesala de la espera
por su condición de impaciente.
Desea ocupar un trono ajado
en medio de una cordillera de nubes
y colmillos de jabalí
donde sus pies se balanceen
sin que sus suelas rotas
rocen el suelo.
El suelo de la cordura,
de la sumisión aprendida
para enlazar raíces
con el resto del mundo vegetal
que huye de la carne
al tiempo que del corazón.
El inocente respira,
descansa,
macera,
huele,
teme,
suda.
Vuelve.
Quizás tan sólo necesitaba un abrazo.
Ya lo tiene.
Ahora juega a su inocencia.
Y sabe que no está en un sueño.

martes, 6 de marzo de 2012

En la cola del Santander


míralo aún sigue en la puerta con el móvil pegado a la oreja como un complemento más de su pelo engominado o de su brillante alopecia.
me gustaría saber de qué cojones se ríen en la puerta de sus bancos con el maletín en una mano y el móvil en la otra hablando con alguien que seguramente se está riendo también de lo mismo que este primero.
seguro que se ríen de mí  de nosotros y se lo cuentan el uno al otro mientras yo miro con mi cara de lelo sin saber ni qué decir pero con una ganas locas de plantarles un puñetazo en los morros  y ver como se caen al suelo sus gafas de montura al aire haciéndose mil pedazos sus cristales orgánicos.
no no te rías o al menos no lo hagas delante de mí en la puerta de tu finca blindada mientras mi dinero te hace tanta gracia como para contárselo a otro con tu mismo traje ondeante como bandera negra y tu misma cara de gilipollas y sólo vosotros dos le pilléis la gracia al chiste.
o si no ríete pero no llames a tus abogados cuando te parta los morros y después llame con tu móvil  para contarselo a un colega y nos doblemos de risa mientras compruebas que entre los dientes que se tambalean en tu boca aún queda alguno ileso. seguramente sean las muelas del juicio.

- El siguiente por favor -.

domingo, 4 de marzo de 2012

Cuando los elefantes sueñan con la música



Cuando los elefantes sueñan con la música
cruzamos la manchega llanura 
rumbo al sur.
Te mece su nana,
arropa tu sueño,
mientras tamborilean en la luna delantera
las aguas de marzo.
Sólo mi voz distraída,
mezclada con el eco de Jobim,
te devuelve a un tiempo presente
en el que deslumbran los quitamiendos fugaces
de la carretera.
Saudade mi niña, saudade,
de donde partimos
y hacia donde vamos.
Saudade.
                                                         (Sin elefantes,
                                                                  cada viernes está incompleto
                                                                                            y el día se acaba 
                                                                                                        al cumplir veintitrés horas.
                                                                                                                                        Saudade.).

                               (Gracias Carlos Galilea, a ti que nos serviste la bossa en bandeja de plata).

lunes, 27 de febrero de 2012

MOTOSIERRA

MOTOSIERRA
Los juguetes olvidados 
parecen un nuevo tesoro encontrado en una caja llena de polvo y hollín.
Los abandoné hace media vida,
teniendo en cuenta que recién cumplí cuatro años.
Forzosa barbacoa en el jardín desierto
para quemar las malas hierbas que impiden la llegada al hogar.
Me sorprende ver mi nueva casa llena de telarañas
que blanquean sus rincones.
Trampas dejadas por las últimas pobladoras
de un cielo raso mal acabado.
Aparezco ante mis padres con una pala de plástico sucia y rota.
Con un maletín mariposa sin pilas
cuyas luces sonoras dejaron hace mucho de cantar y brillar.
(Media vida, ya lo dije).
Con un estuche de rotuladores secos.
Con un balón pinchado al que se le ven las tripas.
Con un tronco quemado.
Nada.
Juguetes. Sólo son juguetes.
Los juguetes en manos de un niño 
no llaman la atención.
No surge efecto.
Mejor cojo la motosierra de mi padre.
Pesa.
Pero esta vez se han fijado en mi.
¿Tan retorcido hay que ser
para que sepan que existes?
Dejaré los juguetes
para cuando sea mayor.

martes, 21 de febrero de 2012

Cinco versos, se acabó.













CINCO VERSOS, SE ACABÓ

Una pera de madera
Un zapato puesto al sol
Un gigante cabizbajo
Un pollo en un almohadón.

Dos hormigas con sus cascos
Dos varetas de reloj
Dos monedas de cobalto
Dos flautas hechas de boj.

Tres mangas para un chaleco
Tres lunares en tu cuello
Tres monos pueblan la luna
Tres nanas para una cuna.

Cuatro espigas de centeno
Cuatro dueños sin señor
Cuatro patas de camello
Cuatro días cuatro son.

Cinco puntos en un dado
Cinco dedos al piano
Cinco letras necesarias
Cinco huellas en el barro
Cinco versos, se acabó.

sábado, 11 de febrero de 2012

Sábado 11 de febrero: Montería

MONTERÍA


vienen
con sus flamantes sangyonnes negros a joderme la mañana nada más despuntar el alba,
a invadir las calles de mi pueblo disfrazados de militares con sus caras rojas e hinchadas,
a imponer su bucólico estado de sitio en mi rincón de paz.
escucho los ladridos enloquecedores de sus podencos extasiados por la falta de aire,
jauría patiatada,
¿acaso voy yo a matar las palomas de muñones enquistados de sus parques?
¿persigo a los estorninos acompañado de un batallón de deficientes armados?
¿me paseo con una beretta con mi apellido grabado en la culata por sus calles?
pues con qué derecho tú, cazador, andas armado por la puerta de mi casa
un sábado a las siete de la mañana.
vete a tu parcela y da de comer mierda a tus amigos
mientras disparáis con una carabina de plomos a vuestras cervezas compradas en el LIDL.
deja en paz los montes
y monta tu estado de sitio en tu ciudad. dispara a los maniquís de los shoppings. 

miércoles, 8 de febrero de 2012



ITALO (Poema rápido y ajeno)

El Barón Rampante dormita
en un inexistente sueño demediado.
¿Dónde coño te has metido Calvino?
Te buscaré por el sendero de los niños araña
Que lleva a la ínsula invisible
Donde no existe la especulación inmobiliaria.
Te secuestraré de tu noche de invierno
A orillas del Pó,
Para que veas en qué nos hemos convertido.
Atravesaremos el puente levadizo
Bajo el sol jaguar
Para invadir hormigueros ingentes
con palomas grises
de las Antillas.
Corre, la ciudad te espera,
Y el pueblo también.

miércoles, 1 de febrero de 2012

En manos de necios - Oda al maestro idiota

       

            En manos de necios -  Oda al maestro idiota       


los esclavos del ejercito de la instrucción no enseñan con la risa,
se pierde el ciclo del humor en libros de tedio y ferrocarril del oeste
el hombre-metalúrgico se esculpe a cinceladas de supuestos presupuestos


la ola de calor
invade de frío las aulas tricolor
y protege al ecuestre entarimado
de las hordas de la risa


temblor de labios ante el miedo
temblor de suelos en la inmovilidad
temblor de piernas por la ausencia de peso


se niega tres veces para afirmar rotundamente
el egoísmo de la presencia incuestionable
y el todoísmo inquebrantable 
del ciego sin ceguera


el necio reparte la palabra
como caramelos trampa
fingiendo no querer nada a cambio


y la risa sigue guardada en un baúl de titanio
amordazada bajo un monolito de leyes
por el bien de la falsa moneda
con la que se paga al que no vale nada.

domingo, 22 de enero de 2012

Combustión


"Combustión"

Me he sentado sobre el musgo rojo de Luzón
a contemplar el paisaje desierto
que deja el infierno alentado por la imprudencia
y el endiosamiento de los hombres.
Las areniscas dibujan modernistas balcones
cubiertos de forja ocre
y yo me siento a fumar el humo del incendio
para serigrafiarlo en mis pulmones.
Intentaré no olvidar
que no he de ser el último
que enfangue de barro
sus botas en estas tierras,
antaño vestidas de verde rodeno.
Cerca del Marojal
los cauces secos
trazan esponjosas calzadas
al abrigo de la maleza.
Somos nosotros quienes llevamos el mal
a lugares donde no tiene porqué arraigar.
"Combustión", reza la obra holliwoodiense de mierda
de un escultor ajeno al daño pertrecho.
Madera marina, acero y cemento,
10 x 1,80 metros aproximadamente.
Obra permanente, inconsecuente.
Qué inane resulta el arte
venido de fuera.
             (En homenaje a Celso y Mariano - forestales rayanos -, al pueblo de La Riba y a todos aquellos que vieron su monte arder ese 18 de julio de 2005).


jueves, 19 de enero de 2012

Génesis: Libro Primero de Moshé


En el principio fue la mentira
y la explotación de la ignorancia.
Las tinieblas dejaban bailar
a los pájaros anacoretas
en los silencios de la noche.
Después trajeron el miedo
en un arca de oro
para repartirlo a los pobres
faltos de pan.
Separaron las aguas
y con ellas los países
para romper la hermandad
que permite a uno ponerse en el lugar del otro.
Agotaron la tierra fértil
para evangelizar el hambre
que sometiese a todos
bajo un oxidado yugo.
Todo lo demás
se haría solo.
Dentro de poco
el cielo se nos caerá encima;
con tanta gente allí
sin haberse demostrado
su existencia ingrávida.

Jonás García

Jonás García


Mi nombre es Jonás García,
el no nacido.
Nadie me engendró
ni si atrevió a decir mi nombre
en el momento de la consumación.
Ninguna partera cortó el cordón umbilical
que todavía me une al vientre de la madre.
Y sigo vivo.
No salí del vientre de la ballena
dando un paseo en barca
sino con un pica-hielos en la mano
para trepanar religiones.
Y sigo dentro.
Tampoco rogué a un dios colérico
que nunca da nada
sin recibir nada a cambio
ni por error.
Y sigo vivo.



martes, 17 de enero de 2012

Aquella noche no lloré

Aquella noche no lloré
pero pude haber llorado;
tampoco grité
ni me imaginé tirando piedras a un estanque roto,
pero rompí todos los cristales
que llevaba clavados dentro
para que se multiplicasen hasta el infinito.

El dolor llevado al infinito
se olvida mejor
pues no sabes donde encontrarlo.

Aquella noche no lloré,
mis ojos tampoco veían nada
por el peso de mi cabeza
que no les dejaba respirar.

Aquella noche no lloré,
las lágrimas no estaban.
Quizás tampoco yo,
de ahí mi ausencia de sentimientos.

Aquella noche no lloré
pero pude haber llorado.

EL ODIO DE CAÍN

EL ODIO DE CAÍN

El Odio de Caín es el sueño de un oso esquivo
tras la mirada de su hermano inocente por no nacido.
El Odio de Caín se esconde tras el aliento humano
del amanecer nevado.
El Odio de Caín no es consciente
pero hiere como una hoja de afeitar sincera.
El Odio de Caín no teme
al dolor humano ni a sus amenazas.
El Odio de Caín crece
con el frío de la mañana.
El Odio de Caín no reconoce
sílabas trabadas.
El Odio de Caín late
entre construcciones cúbicas
que delatan añoranza de hogar pretérito.
El Odio de Caín muere
a la hora de comer
si el postre es tarta de chocolate con bizcocho.
Pero está esperando
para volver a nacer mañana.